La formación universitaria del Periodismo en la Universidad Católica Argentina

La formación universitaria del Periodismo

en la Universidad Católica Argentina(*)

 

Por Julio A. J. Carrillo

 

El periodismo informativo en tiempos de COVID, particularmente en su rol de alertar sobre posibles peligros para la salud pública y lograr ciertos consensos sociales en relación a las medidas que es necesario adoptar para el cuidado de los ciudadanos de las democracias del mundo.

 

En ese marco, las universidades son relevantes en el rol de formación universitaria de los profesionales del periodismo.  Y las industrias culturales demandan una formación integral y humanística cada vez más profunda en tal sentido. 

 

Como referencia de ellos, en este artículo se relata una experiencia educativa que se inició hace ya 36 años, en pleno regreso del Argentino al sistema democrático; donde dos empresarios de medios periodísticos gráficos, el Sr. Aníbal Vigil, entonces Director Ejecutivo de Editorial Atlántida y el Dr. José Antonio Aranda, Vicepresidente del Grupo Clarín; solicitaron al entonces Rector de la Pontificia UCA, Mons. Guillermo Blanco, la colaboración de esta institución educativa en el desarrollo de dos distintos cursos de perfeccionamiento periodístico.

 

En un nuevo contexto institucional del país, estas empresas deseaban promover el perfeccionamiento de la formación profesional de periodistas, orientada por fuertes valores democráticos y de responsabilidad social, en el marco de la tan anhelada libertad de expresión. El Rector de la UCA imaginó inicialmente que podrían ser actividades académicas de extensión, por lo que pidió al Dr. Julio Carrillo, como Director del Instituto de Extensión Universitaria (IEU), la apertura y dirección de esos cursos en ese nuevo campo profesional para la Universidad, quien lo tuvo a su cargo durante el período 1985- 2001, bajo distintos desempeños académicos.

 

Quisiera destacar la satisfacción que fue para mí, conformar el grupo que dirigiría la carrera de Periodismo de la UCA por más de 30 años, donde tuve la posibilidad de, como director del Instituto de Extensión Universitaria, iniciar las conversaciones para crear un curso en el que se profundizaran los conocimientos de los periodistas de Atlántida. En mi carácter de miembro del Consejo Superior del Instituto, el Rector monseñor Guillermo Blanco me encomendó que hiciera la reflexión académica, con la colaboración de instituciones culturales y de bien público, la experiencia recogida y los apoyos empresarios. Se propuso que sean motivo las relaciones institucionales de la Universidad facilitar el desarrollo de la enseñanza de Periodismo y la discusión de sus actividades.

 

Estos objetivos fueron los que guiaron mi gestión frente al ICOS, con el apoyo empresario de Aníbal Vigil de Editorial Atlántida, la Fundación Roberto Noble, el diario Clarín, la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires con pasantías en ese país, el Periodismo se desarrollaba con los apoyos institucionales y de bien público. En base a pedidos con apoyos empresarios se comenzó con la carrera de publicidad, es decir que seguiríamos creciendo, siendo mi mayor logro en cuanto a ejes de enseñanza y conocimiento de la profesión.

 

Era imprescindible avanzar en la formación de las nuevas generaciones que procurasen el equilibrio entre la idoneidad profesional del quehacer periodístico y la formación humanística fundamentada en una cosmovisión cristiana como la que brindaba la UCA. Periodistas que respondieran a los nuevos desafíos de un cambio de época.

 

Desde el inicio de los cursos, se incorpora al equipo que conformé la Dra. Alicia Casermeiro de Pereson (Profesora Emérita UCA), en carácter de Coordinadora Académica y docente del antiguo Instituto de Extensión Universitaria (IEU) de la UCA. Debiendo de señalar el apoyo brindado por la misma, como así también los aspectos técnicos en los que se especializó, habiendo actuado en conjunto con el suscripto con dedicación para llevar adelante la mejor forma en la Universidad con un recuerdo de momentos vividos.

 

Durante el año 1985, se inician los primeros dos cursos de periodismo: el primero fue el Curso Universitario en Periodismo (1985-1987), con el apoyo de Editorial Atlántida; que a los pocos años sería convertido en la carrera de Tecnicatura en Periodismo (1987-2003), del cual egresaron más de 1200 Técnicos Universitarios en Periodismo, donde ya se integró en la currícula el área de formación audiovisual. El segundo, el Curso de Posgrado en Perfeccionamiento Periodístico, más conocido como Beca UCA-Clarín, con el apoyo de la Fundación Dr. Roberto Noble, del que egresaron 324 profesionales entre los años 1986 y 1999.

 

Una primera característica del espíritu de esos años fue la pionera integración universidad-empresa, algo poco frecuente en ese entonces, donde escaseaba el diálogo entre la universidad y los medios de comunicación. Los dos programas, tanto el de Tecnicatura en Periodismo como el de la Beca UCA-Clarín de posgrado en Formación Periodística, fueron los primeros pasos de un diálogo fructífero donde las empresas daban espacios para el desarrollo de las prácticas periodísticas pre-profesionales  (en el caso de la tecnicatura) y profesionales ( en el caso de la Beca de Posgrado UCA Clarín). De esa manera se fue construyendo un clima de diálogo respetuoso de las singularidades de las partes que integraba una formación teórico-práctica.

 

Los profesores de la Universidad y los profesionales del periodismo convocados para ser docentes fueron compartiendo e intercambiando experiencias educativas muy desafiantes. Profesionales como el Maestro Laiño, el Dr.  Mariano Grondona, Horacio Carballal, Alfredo Serra, Cherquis Bialo, Juvenal, Jorge Götling y otros, quienes con el apoyo de sus empresas, se integraron al claustro docente que se complementaban con los profesores de las materias humanísticas que venían del ámbito académico de la UCA. La sala de profesores de la casona de Riobamba 1227 era un ámbito para las conversaciones sobre la actualidad y anécdotas muy interesantes del quehacer periodístico, que solían continuar debates iniciados en las aulas.

 

Es destacable que una de las características de la enseñanza que se impartía en esa época fue la valoración de la enseñanza de las técnicas de escritura y entrevista como instrumentos básicos del periodismo en sus distintos géneros. Los docentes insistían a sus alumnos que no se puede narrar los hechos “noticiables” si no se es capaz de escribirlos en forma coherente y sin errores gramaticales.

 

Para ello, ya mudados al Campus UCA de Puerto Madero, se pudo contar con una amplia Sala de Redacción y, para el área audiovisual, con el Centro de Radio y TV, totalmente equipados.

 

Los avances fueron notables, tanto en la cantidad de aspirantes a ingresar a nuestras carreras (con un proceso de selección estricto, según las vacantes disponibles), como en mantener permanente el compromiso de todo el equipo de profesores con un objetivo común: mejorar la formación profesional en base a valores, como la permanente y honesta búsqueda de la verdad junto al desarrollo de habilidades profesionales de alta calidad y confiabilidad. Estos fueron los objetivos que privilegiaron los profesores para con los estudiantes de periodismo que egresaron de la UCA.

 

A partir del año 2000, siendo Directora del entonces Instituto de Comunicación Social, Periodismo y Publicidad (ICOS) la Dra. Alicia Casermeiro de Pereson, la Pontificia Universidad Católica Argentina recibió la aprobación del Ministerio de Educación de la Nación (Resolución Ministerial N° 88) para dictar la nueva carrera de Licenciatura en Comunicación Periodística.

 

Ello constituyó un gran paso para el equipo que contó con el asesoramiento de la Lic. Silvia Pellegrini, Decana de la Facultad de Comunicaciones de la Pontificia Universidad de Chile y el invalorable compromiso de la Lic. Cecilia Balbín, profesora de la Tecnicatura.

 

¡Por fin la UCA pudo convertir la formación periodística en una carrera de grado académico! En este nuevo contexto, el cuerpo docente se amplió ya que los 4 años de duración de la carrera de licenciatura exigieron que al cuerpo de docentes se sumaran profesores de otras unidades académicas de la UCA, para el dictado de las 40 materias que abarcaba la carrera.

 

Con el apoyo del entonces Rector de la UCA, Mons. Dr. Alfredo Zecca, el área audiovisual se fortaleció con nuevo equipamiento en el año 2001, consiguiendo posicionarse como un ámbito educativo de avanzada tecnológica, bajo la Coordinación del Lic. Juan Chiesa. También en esa época nace el periódico estudiantil “Cinco WW”, que hoy sigue publicándose y fue premiado por organismos nacionales e internacionales.

 

En el año 2003, fue acreditada la carrera de Licenciatura en Comunicación Periodística internacionalmente, por parte del Consejo Latinoamericano de Acreditación de la Educación en Periodismo (CLAEP), la primera y única en Argentina, con amplio eco en los medios gráficos. La vista de acreditaciones de tres países de Latinoamérica certificó el cumplimiento de los 11 estándares internacionales de calidad académica y profesional en la formación del periodismo de la UCA. En años posteriores CLAEP reacreditó la carrera de periodismo por dos períodos consecutivos.

 

En 2004 se crea la “Agencia de Comunicación ICOS”, ofreciendo un servicio a ONG´s que necesitaban apoyo en esta área. En 2005 la producción del programa “Factor Futuro”, que se emitía por Canal Metro y contaba con nuestra profesora Clara Mariño como su productora, donde también participaban alumnos de los últimos años como colaboradores.

 

Durante el año 2007 la CONEAU autoriza el dictado de la Maestría en Comunicación Audiovisual, y con ello se da otro paso, como es la formación de posgrado. Desde sus inicios más del 30% del alumnado de la Maestría provenían de varios países de Latinoamérica

 

Durante el año 2009, la Dra. María Teresa Baquerín de Riccitelli, quien se desempeñaba anteriormente como Coordinadora Académica, asume la Dirección del ICOS, consolidándose la investigación en temas de comunicación social que ya había comenzado  a ocupar un lugar central en nuestro ámbito, con el nombramiento de profesores con mayor dedicación que fueron apoyados por la UCA a fin de obtener sus títulos de posgrado (maestrías y doctorados) y la publicación de libros y artículos científicos en revistas científicas nacionales e internacionales.

 

Para ese entonces, ya se contaba con una publicación científica propia del área, indexada por EBSCO, titulada “Ecos de Comunicación”.

 

Asimismo, a nivel de grado y posgrado se incorporaron estudiantes internacionales, mientras que algunos de nuestros alumnos accedían a becas de estudio e intercambio con universidades y fundaciones de Latinoamérica, Europa y EEUU, gracias a la coordinación internacional a cargo de la Lic. Cecilia Balbín.

 

En el año 2010 el Instituto de Comunicación Social, Periodismo y Publicidad (ICOS), que había dado origen a las carreras de periodismo y publicidad pasa a integrar la Facultad de Ciencias Sociales, bajo la dirección del Dr. Florencio Hubeñak como Decano Delegado de la Facultad de Ciencias Sociales por el entonces Rector de la UCA. Mons. Dr. Víctor Manuel Fernández. De esta manera, a partir de ese momento, los títulos que recibieron nuestros graduados en periodismo, fueron otorgados por la Facultad de Ciencias Sociales de la UCA, en la que la formación en Periodismo convive con otros saberes sociales y otras carreras humanísticas como Ciencias Políticas, Historia, Sociología y Ciencias de la Educación.

 

Esta tarea de integración la asume la actual Decana de la Facultad, la Dra. Liliana Pantano, quien consolida la pertenencia del claustro docente mediante una nueva identidad y una mayor integración interdisciplinaria.

 

Con paso lento pero seguro, la UCA ya lleva 36 años en la enseñanza del periodismo. La carrera de Licenciatura en Comunicación Periodística tuvo tres directores: el Mg. Tristán Rodríguez Loredo, Mg. Jorge Liotti y el Lic. Hernán Cappiello, este último actualmente a cargo del departamento. Todos ellos destacados profesionales del periodismo.

 

Las universidades se enfrentan a nuevos desafíos acordes a los cambios de época. Los medios, en sus múltiples nuevos soportes, siguen siendo el camino para dar visibilidad a los problemas sociales y colaborar con ciertos consensos respecto de las soluciones posibles.

 

Para finalizar quisiera destacar la importancia que en la carrera de periodismo ha tenido la impronta cristiana, la cual quedó plasmada en las citas del Concilio Vaticano Segundo y el D.  Inter mirifica sobre los medios de comunicación social. En un texto muy sencillo se limita a elogiar la labor de la prensa para el desarrollo de la vida social y Misión de la Iglesia en el mundo: `El Derecho a la Información es consecuencia del derecho natural a conocer la verdad y comunicarla`, Pablo VI, Communio et Progressio. Y dijo Juan Pablo II en la instrucción Pastoral Aetatis Novae, documento redactado por periodistas y no por canonistas: “Ha llegado el momento para que los comunicadores cristianos den la cara en el terreno práctico con competencia profesional en lugar de quedarse con los brazos cruzados lamentando abusos y malos usos que de los medios de comunicación social hacen, tomando en consideración la revolución tecnológica en ese campo”.

 

 

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